Conversar sobre sexo y protección sigue siendo un desafío. Abordar el uso de preservativos en pareja se convierte en un tema delicado y mucho más aún cuando el vínculo es serodiscordante, es decir, cuando uno de los miembros de la pareja vive con VIH y el otro no.
El uso de preservativos sigue siendo una de las maneras más efectivas para prevenir la transmisión del VIH y otras infecciones de transmisión sexual (ITS). Sin embargo, muchos encuentran difícil hablar de ello, ya sea por tabúes, incomodidad o el miedo de parecer desconfiado frente a la pareja. En una relación serodiscordante, esta conversación es aún más relevante para reducir riesgos y demostrar apoyo mutuo.
La comunicación es un factor importante en toda relación y, en las parejas serodiscordantes, es la clave que permite liberar tensiones e intentar la comprensión del otro y de uno mismo. El miedo, el temor, el enojo, la tristeza, pueden paralizar. Sin embargo, forman parte de un proceso mediante el cual la pareja aprende a convivir con el VIH.
Sugerencias para iniciar esta conversación clave:
Abordar el tema de forma natural: hablar de preservativos no debería ser un tabú. Es importante introducir el tema en un ambiente relajado, sin presiones y con el objetivo de cuidar a ambos.
Infórmense juntos: educarse sobre el VIH, su transmisión y los métodos de prevención puede ayudar a reducir miedos infundados. Conocer juntos los beneficios del uso del preservativo, además de nuevas opciones como la PrEP (profilaxis preexposición), puede fortalecer el vínculo.
Elegir qué marcas utilizar: es importante hablar sobre las marcas que prefieren ya que el mercado tiene una amplia oferta. En el caso de Prudence, ofrece una variedad de opciones para adaptarse a las necesidades y preferencias de cada pareja, que ofrece desde sabores, colores y texturas.
Crear un espacio de escucha y aceptación: cada persona tiene sus propios temores y preocupaciones. Escuchar y mostrar comprensión fortalece la confianza en la pareja y hace que ambas partes se sientan seguras y valoradas.
Buscar apoyo profesional: si es difícil hablar de estos temas, existen terapeutas y grupos de apoyo especializados, sobre todo en relaciones serodiscordantes, que ofrecen herramientas y técnicas para mejorar la comunicación y aprender sobre métodos de prevención.
Children´s Minnesota, uno de los uno de los sistemas de salud pediátricos independientes más grandes de los Estados Unidos, manifiesta sobre la práctica de posibles forma de reaccionar ante una conversación de este tipo:
Si el planteo es: “Es incómodo”.
La respuesta puede consistir en decir que acostumbrarse a llevar puesto un preservativo es algo que requiere cierto tiempo.
Si el planteo es: “Me quita las ganas por completo”.
Contestar que el sexo sin protección es lo que quita las ganas por completo. Y de forma permanente.
Si el planteo es: “Si nos amamos de verdad, debemos confiar el uno en el otro”.
La respuesta es que precisamente porque se aman tanto quieren tener la seguridad de que ambos están seguros y protegidos.
Si el planteo es: “¿Tenés miedo que te contagie algo?”.
La respuesta natural debería ser: A veces las personas ni siquiera saben que están infectadas, así que es mejor estar seguros.
Si el planteo es: “No disfrutaré del sexo si usamos preservativo”.
Responder que no podés disfrutar del sexo a menos que sea con protección.
Si el planteo es: “No sé cómo ponérmelo”.
Esta es fácil: Ningún problema, dejame que te enseñe.
“Tener herramientas para abordar estos temas, es fundamental. Desde DKT es nuestra mayor labor concientizar acerca del constante uso de los métodos de protección al momento de tener sexo en todo tipo de relaciones”, comenta Luiz Meira, Country Manager DKT Argentina y continuó: “La información, en cualquier ámbito, es poder, y en un vínculo sexoafectivo, poder conversar y discutir sobre métodos y sus variantes de protección se vuelve un acto de amor y salud.”