Esta noche,
¡tómame entre tus brazos!
Llévame por un mágico sueño,
sin palabras, sin promesas…
Solo basta un susurro de amor,
que se funda en un suspiro.
Que recorra el mundo entero,
tocando todo a su paso
cuál dulce viento; pronunciando
tu nombre y rodeado de un: ¡Te quiero!