En el día de Santa Lucia: Los ojos de mi país

El 13 de octubre ha sido establecido por la Organización Mundial de la Salud (OMS) como el Día Mundial de la Visión, una jornada dedicada a concientizar sobre los problemas oculares y la prevención de la ceguera. Esta fecha coincide con la celebración de Santa Lucía de Siracusa, patrona de la visión, una figura histórica que, irónicamente, fue privada de sus ojos por defender su fe cristiana, y es comúnmente representada con ellos en la mano.

La OMS busca que esta fecha impulse la difusión sobre la importancia de los exámenes oculares regulares, vitales para prevenir diversas afecciones que pueden llevar a la ceguera si no son tratadas a tiempo.

Las principales afecciones oculares
Existen muchas enfermedades oculares que progresan con síntomas leves o imperceptibles, como el glaucoma, la retinopatía diabética y algunas degeneraciones maculares hereditarias, pero que si no se tratan, pueden resultar en ceguera. En otros casos, las afecciones aparecen de manera brusca y dolorosa, como el glaucoma agudo, la uveítis o las úlceras corneales.

Debido a estas amenazas a la visión, es fundamental acudir regularmente al oftalmólogo. No solo para corregir defectos ópticos como la miopía, el astigmatismo o la presbicia, sino para realizar exámenes más completos. La biomicroscopía, por ejemplo, permite detectar alteraciones en la córnea y el cristalino (cataratas), mientras que el examen de fondo de ojo evalúa la retina, una extensión del cerebro, por métodos como la oftalmoscopia o la retinografía.

El impacto de los problemas visuales en Argentina
Según datos del INDEC, un millón de argentinos padecen algún tipo de discapacidad visual grave, lo que incluye visión reducida y problemas en el campo visual. De este grupo, el 96,4% tiene mucha dificultad para ver, y el 3,6% es completamente ciego. A nivel global, la OMS estima que 2.200 millones de personas sufren algún deterioro visual, y casi la mitad de esos casos podrían haberse prevenido con un tratamiento oportuno. Estas cifras son alarmantes y reflejan la importancia de los controles visuales en Argentina.

El glaucoma, conocido como “el ladrón silencioso de la visión”, afecta al 1% de la población, pero solo la mitad de los afectados sabe que lo tiene. La detección temprana podría evitar la progresión hacia la ceguera en la mayoría de los casos. Por otro lado, el 9% de los argentinos es diabético, y casi un tercio de ellos sufre algún grado de retinopatía diabética, otra afección insidiosa que puede conducir a una pérdida considerable de visión si no se diagnostica a tiempo.

Cada año, una de cada 10.000 personas sufre un desprendimiento de retina, una condición que muchas veces requiere cirugía y que podría prevenirse con un examen de fondo de ojo. La miopía, que afecta al 30% de la población y ha aumentado en los últimos años, también predispone a enfermedades oculares graves como el glaucoma y el desprendimiento de retina.

La catarata sigue siendo la causa más común de ceguera evitable, afectando al 17% de las personas con discapacidad visual en el mundo. Lamentablemente, en muchos casos no se operan debido a la falta de recursos. La detección temprana de la miopía en los jóvenes es crucial, ya que existen tratamientos que pueden frenar su progresión, como el uso de colirios y anteojos especializados.

Un desafío para la salud pública
El impacto económico de los problemas visuales también es significativo. En Argentina, se estima que se pierden mil millones de dólares al año debido al ausentismo laboral relacionado con la salud visual. Estas cifras subrayan la importancia de tomar medidas para prevenir y tratar las enfermedades oculares a tiempo.

Argentina cuenta con oftalmólogos de gran prestigio internacional, pero lamentablemente, los recursos y la retribución a los profesionales del sector son insuficientes en comparación con otros países de la región. Es fundamental que se asignen los medios necesarios para combatir esta problemática de manera efectiva.

En este Día Mundial de la Visión, es esencial reflexionar sobre la importancia de cuidar nuestra salud ocular. La prevención y el diagnóstico temprano no solo pueden evitar la ceguera, sino que también son una inversión clave para el bienestar de la población.


Como dijo el célebre escritor Thomas Hardy: “Solo hay una cosa peor que la ceguera, y es ver algo que no es”.

Por Dr. Omar López Mato
Miembro de CAMEOF