SE TRATA DE UN BUZÓN DE LA CIUDAD QUE FUE RESTAURADO Y HARÁ UNA RECORRIDA POR DISTINTOS BARRIOS PARA QUE LOS NIÑOS DEPOSITEN SUS DESEOS Y PEDIDOS A PAPÁ NOEL, EN EL MARCO DE LAS FESTIVIDADES POR NAVIDAD Y AÑO NUEVO.
En el marco del programa Navidad en la Ciudad, la Secretaría de Gobierno y Vínculo Ciudadano junto a las Comunas de la Ciudad lanzaron la iniciativa “Compartí tus deseos en navidad” en el que se propone a las familias porteñas que puedan escribir junto a los más pequeños, una carta a Papá Noel, o simplemente dejar sus deseos para el año nuevo.
Desde el próximo 10 de diciembre un buzón histórico que fue restaurado por la Ciudad iniciará un recorrido por tres sedes comunales para que las familias puedan acercar sus cartas.
El itinerario será el siguiente:
• Del 10 al 12 en la Comuna 13 Av. Cabildo 3067 de 8 a 16 horas.
• Del 15 al 17 en la Comuna 6, Av. Patricias Argentinas 277, de 8 a 16 horas.
• Del 18 al 20 en la sede de la Comuna 15, A. Córdoba 5690, de 8 a 16 horas.
Sobre la restauración de buzones
Se estima que aún quedan alrededor de 150 buzones históricos en distintos puntos de la Ciudad. La Dirección General de Competencias Comunales y Talleres del Gobierno porteño trabaja en su mantenimiento y recuperación, especialmente en aquellos que han sido vandalizados o dañados por el paso del tiempo.
Los primeros buzones de Buenos Aires se instalaron hacia mediados del siglo XIX en comercios del Centro, cuando aún eran cajas de madera simples, colocadas allí por motivos de seguridad. En 1858 se incorporaron los primeros seis buzones en plazas estratégicas: Lorea, Independencia, Temple, Parque, Once de Septiembre y Paseo de Julio. Cada tarde, un empleado realizaba la recolección a caballo.
Durante décadas, el correo postal fue el canal por el cual transcurría la vida cotidiana de familias y empresas: permitía hacer compras por catálogo, cursar estudios a distancia o enviar una simple carta. Con la irrupción de las nuevas tecnologías, los buzones dejaron de ser protagonistas de la comunicación diaria. Aquella costumbre de sentarse a escribir una declaración de amor, anunciar un nacimiento o compartir noticias importantes se trasladó a otros soportes y espacios.
Hoy, estos antiguos guardianes de palabras, afectos y deseos permanecen en los barrios como testigos silenciosos de un tiempo que persiste en la memoria de los mayores. A través de un trabajo conjunto entre la Ciudad, vecinos y asociaciones civiles, los buzones son identificados, restaurados y puestos en valor, para que continúen dando cuenta de la identidad porteña y de su historia compartida.

