En la sociedad actual los problemas de fertilidad son cada vez más frecuentes. La postergación del deseo de ser padres - ya sea por elección o necesidad – sumado al hecho de que, a mayor edad de la mujer, la posibilidad del embarazo espontáneo disminuye y la salud masculina también se deteriora en su efectividad, más un alto índice de estrés generalizado y factores congénitos que cada persona puede presentar, hacen que ser padres, en ocasiones, pueda ser una dolorosa complicación para la pareja.