En la última década se ha producido un aumento del crowdfunding personal, con personas recaudando dinero online para diferentes tipos de causas, desde material escolar hasta facturas médicas o gastos funerarios. Los llamamientos se hacen a través de las redes sociales, implorando la ayuda de amigos, familiares y conocidos. Y, como tantas otras cosas en Internet, algunas de estas acciones son realmente estafas.