Llegó el mes de Papa Noel, las calles están vestidas con adornos navideños y la ciudad despliega toda la oferta turística para regalarle a los visitantes momentos inolvidables. La ruralidad por su parte, hace lo suyo con grandes árboles navideños llenos de luces, armados en la entrada de algunos de los pueblos. Las ferias comienzan a instalarse en las plazas cada fin de semana de la mano de las emprendedoras que despliegan sus productos.