En este sentido diferentes especialistas han comenzado a esbozar ideas coyunturales: gravar impositivamente la automatización para tornarla más onerosa y frenar o desacelerar la misma; reducir la jornada laboral y también estructurales como el pago de un ingreso universal básico. Es decir se busca explorar distintos cursos de acción que por lo menos morigeren los efectos de la automatización sobre el empleo, poniendo la política y la economía al servicio del hombre, tal como lo pregona el Papa Francisco. Lamentablemente las políticas implementadas por la Alianza Cambiemos en nuestro país van en sentido contrario a este enfoque, toda vez que se deja la suerte del empleo librada a los avatares del mercado.
¿Cuáles serían las propuestas indicadas para crear empleo en este contexto de crisis? Claramente aparece aconsejable promover la actividad económica con un fuerte apoyo a las pymes, que se constituyen como las principales dadoras de trabajo en nuestro país y en el mundo. En simultánea decisión y acción para potenciar el poder de consumo de los asalariados activos y pasivos. Estos, al volcar sus salarios al consumo, generan un círculo virtuoso: mayor actividad económica, mayor consumo, mayor demanda, mayor producción, mayor creación de nuevos puestos de trabajo y así sucesivamente. Nuestro apotegma es “Gobernar es dar trabajo”. Esto es lo que estudiamos, pensábamos y hubiéramos hecho si Daniel Scioli hubiera ganado las elecciones presidenciales, todo lo contrario a ajustar a costa de los trabajadores, generando desempleo y pobreza, que es lo que sucede actualmente.