"El proyecto de presupuesto reduce en 600 millones los subsidios para nuestros Bomberos Voluntarios, una de las actividades que más valora y respeta la sociedad. Hay que bajar el gasto, pero las reducciones deben hacerse con sensibilidad y pericia y no cortando partidas con cuchillo de carnicero. Hay cien sectores a los que debería reducírsele las partidas, empezando por las jubilaciones de privilegio de ex ministros y legisladores nacionales y provinciales. El país espera justicia y ella también debe hacerse presente a la hora reducir el gasto fiscal", concluyó Asseff.