El Defensor del Pueblo es el aporte más importante del derecho público para mejorar la calidad institucional. Fortalece el sistema democrático, encauza la participación popular y se convierte en una efectiva herramienta de garantía de los derechos de la población.
“La confianza de la ciudadanía en la Institución construyó una herramienta de uso diario para la solución de sus problemas, muestra de ello es que en el año 1999 se conformaran 988 expedientes y en el año 2017 15.689 vecinos requirieron de la intervención de la Defensoría del Pueblo en las distintas problemáticas que se abordan”.